Llevo surcos gimiendo
por la angustia
de tu ausencia.
Están mis montañas llenas
tienen dolor
claman clemencia.
Porque tu abriste surcos
en mi tierra desierta
cuando fue mi amanecer
como yo no lo quisiera.
Ven y calma este dolor
de mis surcos ymontañas
y quita este ardor
de todas mis entrañas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario